¿Por qué es tan popular? Es adaptable a cualquier tipo de rostro Gracias a las diferentes técnicas de corte y las múltiples opciones de largo, el Bob escalado puede favorecer a cualquier forma de rostro. Es fácil de peinar: Su versatilidad permite crear desde looks casuales hasta sofisticados con muy poco esfuerzo.
Renueva la imagen: Es una forma sencilla de cambiar de look y darle un aire fresco al cabello.
Capas: La característica principal son las capas, que pueden ser más o menos marcadas dependiendo del efecto que se busque.
Longitud: Puede variar desde un Bob muy corto hasta un lob (Long Bob), que llega a los hombros.
Textura: Puede adaptarse a cabellos lisos, ondulados o rizados.
Clásico: Con capas suaves y un largo que suele llegar a la mandíbula.
Invertido: Más corto en la nuca y más largo en la parte delantera, creando un efecto de V.
Con flequillo: Se puede combinar con diferentes tipos de flequillo, desde el recto hasta el de lado.
Shaggy: Con capas muy marcadas y un acabado más desestructurado.
Forma de rostro: Consulta con tu estilista para encontrar el largo y las capas que mejor se adapten a tus facciones.
Tipo de cabello: La textura de tu cabello influirá en el resultado final.
Estilo personal: Elige un estilo que refleje tu personalidad y sea fácil de mantener en tu día a día.
Peinar un Bob escalado es muy divertido gracias a su versatilidad!
Ondas suaves: Para un look más romántico y desenfadado, puedes crear ondas suaves con una plancha o tenacilla. ¡Recuerda usar protector térmico!
Liso pulido: Si prefieres un estilo más elegante, alisa tu cabello con una plancha y aplica un poco de sérum para un acabado brillante.
Efecto despeinado: Para un look más casual, aplica un poco de producto texturizante y despeina tu cabello con los dedos.
Accesorios: Las diademas, horquillas y cintas pueden darle un toque especial a tu Bob escalado.
Piel clara y ojos claros: Los tonos fríos como el rubio platino, el castaño claro o el cenizo te favorecerán.
Piel cálida y ojos oscuros: Los tonos cálidos como el cobrizo, el caramelo o el chocolate resaltarán tu belleza natural.
Piel oliva: Los tonos miel, avellana o castaño oscuro te sentarán muy bien.
Si quieres experimentar, puedes optar por mechas o balayage para darle más dimensión a tu cabello.